Autenticidad ante todo

Con o sin firma y mientras no se caiga en el plagio, que se asimile una determinada pieza a lo que hace o ha hecho alguien de reconocido prestigio es algo que puede estar marcando el buen camino para quien realice tal pieza, pues así está muy probablemente fijando sus referentes. Cuando en cambio, asimilando muy bien un determinado estilo, se pretenda jugar al despiste o incluso falsear la identidad respecto a cierta autoría, se estará cometiendo cuando menos un error grave.

Mediante las capacidades de elevada interactividad bidireccional que, de hecho a través de la unidireccional con los dispositivos informáticos, nos permite Internet en general y la blogosfera en particular, tenemos ocasión como jamás anteriormente de entablar contacto directo con quienes de los que estén activos en el ciberespacio sean nuestros referentes en el ámbito que sea. Poco lograremos de positivo al pretender, como a veces puede costar evitar, emular casi hasta la copia lo que en particular hagan tales referentes, incluso y por el volcado de todo lo previo que permite Internet aquellos referentes del pasado que ya no estén entre nosotros. Hasta siendo fruto de la mejor de las intencionalidades, en un entorno donde tan fácil es replicar cualquier cosa, lo que exceda de la imitación reconocida, legal y abierta, más allá de posibles finalidades humorísticas o de aprendizaje, es susceptible de que cause sospecha de pretender usurpar el talento de otro. Así pues, autenticidad ante todo sin por ello renunciar a en su caso manifestar o dejar que se intuyan los referentes que tengamos.

Tanto si se trata de algo más bien artístico o personal, como si es más bien técnico o impersonal, si eres capaz de realizar lo que sea con un notable nivel de lo que pueda calificarse de autenticidad, todo público agradecerá que firmes y muestres una identidad corroborable. Con esto evitas que, aun no siendo lo que hagas identificable en modo alguno con la obra de otro, se puedan generar pese a todo dudas al respecto y, en según qué casos, incluso que lleguen a circular, con mayor o menor carácter contundente, atribuciones que no tengan nada de cierto.

OscarWeblogs

No hay comentarios:

Publicar un comentario