Un puente entre generaciones

Poca, o ninguna, experiencia bloguera combinada con edad bastante o muy madura acostumbrará a implicar, si no ya, cada vez más, un serio problema en la capacidad de desarrollar cualquier destacada iniciativa, sea ésta más o menos calificable de emprendedora. No obstante, llegar a manejarse en lo bloguero, al igual que lo referente a la veteranía en el emprendimiento, no entiende demasiado de edades: se trata de una cuestión de resultados. Así pues, hasta quien con una edad bastante o muy avanzada quiera emprender una iniciativa de relevante impacto social, o al menos intentarlo, tiene opciones de conseguirlo si se toma en serio el ámbito bloguero en la realización del proyecto.

En el bloguero experimentado, joven de edad, maduro en cuanto a emprendimiento, por un lado, y el bloguero potencial, de margen maduro de edad y que no ha sido emprendedor, por otro lado, encontramos respectivamente el perfil de persona mejor y peor adaptada a día de hoy en el sentido de tener un cómodo margen de tiempo en su vida para la consecución de llevar un importante número de nuevas iniciativas al éxito, pero entre un perfil y otro hay una amplia variedad de gente y de situaciones particulares y en ningún caso se está exento de opciones de sobresalir como de posibilidades de sufrir tropiezos. Cabe destacar en particular el hecho de que es bastante fácil que se dé, por una parte, la situación de que emprendedores primerizos y de margen de edad juvenil tengan facilidad en el manejo del ámbito bloguero mientras que, por otra parte, emprendedores experimentados y bastante o muy maduros de edad sean en general blogueros, si no únicamente potenciales, tan sólo primerizos. Para un emprendedor joven que tenga el objetivo de alcanzar la veteranía, con cuanta más práctica en lo bloguero cuente más estará allanando el camino hacia los ciclos de madurez de cualquier proyecto y, por la propia juventud de tal emprendedor, tendrá un considerable tiempo por delante a lo largo de la vida para disfrutar de esa madurez de proyecto; asimismo y en pro de recabar experiencia emprendedora que más allá de lo bloguero le pudieran aportar emprendedores veteranos, de margen de edad maduro y no necesariamente avezados en la blogosfera, debiera tener presente la opción de ocuparse de algún modo de verter en blogs lo que de esa experiencia aprenda, sea contando directamente con quien le aporte tal experiencia emprendedora sea por cuenta propia del joven emprendedor en cuestión en base a lo aprendido. Incluso nos parece que, también con la finalidad de adquirir experiencia, resultaría enriquecedor contribuir al máximo a que personas de margen de edad maduro, y que aun no siendo, ni habiendo sido, emprendedoras den el salto al ámbito bloguero. También puede ser conveniente, según se considere oportuno, y estableciendo igualmente un puente entre generaciones, que sean aquellas personas de mayor edad, no familiarizadas con los blogs y hayan sido o no emprendedoras, quienes tomen la iniciativa de recurrir a los más jóvenes y mínimamente avezados en cuanto al ámbito bloguero, o que puedan llegar a serlo, y así conseguir que un legado no adaptado a la blogosfera se vierta en la misma.

Cuando un emprendedor es veterano, sea joven sea maduro en cuanto a edad, y tiene experiencia en el ámbito bloguero está mejor preparado para dotar a sus proyectos de gran facilidad en el paso de ciclos primerizos a ciclos de madurez. Quienes no dispongan de conocimiento en cuanto a los blogs, y mucho menos si además no tienen tampoco voluntad de adquirirlo, correrán el riesgo de retrasar, si no de autobloquear, su potencial emprendedor tratándose sobre todo de gente joven, y el riesgo de que se pierda un relevante legado por no adaptarse al ámbito bloguero, en caso especialmente de gente de bastante o muy avanzada edad.