Parece estar produciéndose un cambio histórico tan intenso como generalizadamente imperceptible o subestimado, pues desde luego la trascendencia de lo que los blogs conllevan en cuanto a la libre publicación de contenidos por cualquiera representa un paso tan decisivo como aparentemente poco valorado. Una generación que va hacia su propio ocaso no termina de asimilar cuán importante son los weblogs y a una nueva generación le falta alguna orientación respecto a la próxima realidad.
En su legítima y conveniente autojustificación de por qué este mismo blog se lleva a cabo, está el intento de servir de algún modo en tanto que esa orientación en cuanto a cómo esta joven generación actual y las siguientes pueden encontrar sentido al panorama transformador al que estamos asistiendo. Si en verdad es, tal y como estoy convencido que es, éste un cambio histórico, ese intento es ciertamente colosal: inapropiado, pues, para un blog estático y más aún para casi cualquier tipo de publicación que no sea justo un blog. Que los blogs se postulen como nuevos medios definitorios de aquella próxima realidad, sin que desde la misma blogosfera se trate el tema, me parece cuando menos una notable laguna a rellenar.
La desorientación ante lo nuevo es tan natural como, hasta cierto punto lamentablemente, la indiferencia ante lo nuevo mismo. Respectivamente, es asimismo natural que tales sentimientos se correspondan con nuevas y mayores generaciones. Lo que jóvenes generaciones va bien que vayan en esencia teniendo presente es que cabe que su cada vez más ineludible actividad en la blogosfera deben asumirla con amplia meticulosidad.
OscarWeblogs
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