Desarrollar la red de redes supuso que, de una informática que no podía ir más allá del sistema operativo típico, se pasaba a una especie de gran sistema operativo compartido. ¿Qué se deriva de todo esto?
La consecuencia directa que, por lo menos a grandes rasgos, resulta identificable consiste en que deja de haber sólo posibilidad de manejar una tipología de código fuente, o tipo de hipertexto, como mínimo generalmente poco accesible de modo directo para el usuario; en este sentido se añade, con el ubicuo big software que Internet implica, un verdadero hipertexto a utilizar más abierta y fácilmente. Se trata de un salto técnica y tecnológicamente recalcable.
Así pues, los tres planos digitales son hoy reproducibles o bien a partir de un sistema operativo típico, o bien a partir de otro sistema también hipertextual como el de Internet. Los sistemas hipertextuales que hemos identificado se corresponden, a su vez, con sendos tipos de hardware: el sistema operativo se aloja en el ordenador de usuario, mientras que el big software, fundamentalmente HTML, que Internet proporciona se aloja en ordenadores de tipo servidor.
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