¡Sorpresa!

Lo que quien se encargue de un blog consigue haciendo que expectativas y resultados sean entre sí cada vez más simétricos es que llevar a cabo tal blog le resulte menos lleno de sorpresas. Con la madurez emprendedora bloguera se llega a alcanzar simetría en este sentido, tanto en interactividad unidireccional como bidireccional, si bien la bidireccional siempre acostumbrará a estar caracterizada por tener más margen para causar sorpresa al emprendedor que sea.

En cuanto a prever las reacciones del público respecto a lo que blogueemos resulta difícil hacer aciertos al cien por cien incluso si hemos adquirido una consolidada veteranía. Sin embargo, a medida que ganemos madurez en nuestra trayectoria bloguera, expectativas y resultados debieran tener tendencia, en el plano de lo interactivo bidireccional y aún más en el de lo interactivo unidireccional, a ser simétricos entre sí además de buenos. Por lo que respecta a la interactividad bidireccional, conseguir simetría entre expectativas y resultados significa que toda reacción que generemos en cualquier público cuadre con aquello que esperábamos. En lo referente a interactividad unidireccional, conoceremos lo suficiente el funcionamiento de la blogosfera como para que, pese a los cambios que en el ámbito bloguero se sigan dando, no nos sorprendamos mucho. Ahora bien, en base a nuestra capacidad de obtener simetría unidireccional y bidireccional es importante que en todo público que tengamos seamos capaces de, sin causar desconcierto ni perturbación, producir cierta usual asimetría en lo que se pueda llegar a esperar de nuestro proyecto bloguero, de modo que sorprendamos a cualquiera que en mayor o menor medida forme parte de quienes visitan lo que vamos blogueando. El paso de blóguer primerizo a maduro consiste, en este sentido, básicamente en pasar de sorprenderse a sorprender, de modo que si al principio somos nosotros quienes sentimos un constante, o casi constante, efecto sorpresa, debemos evolucionar hasta conseguir que todo público sea el que respecto a nosotros sienta precisamente una sensación de ¡sorpresa! ante lo cual su interés por nuestros contenidos se reavive.

Tus inicios estarán marcados por una habitual sorpresa tanto en lo que vayas descubriendo en cuanto a cómo funciona la tecnología bloguera, como en lo que obtengas en cuanto a reacciones del público, o sea, respectivamente en cuanto a interactividad unidireccional y bidireccional. A medida que ganes veteranía, menguará tu sorpresa ante todo esto pero conviene que hayas aprendido a sorprender en la justa medida a cualquier público que más o menos captes y evitar así que aquello que publiques acabe resultado monótono.

No hay comentarios:

Publicar un comentario